El calentamiento global es una realidad y las consecuencias que ya está trayendo no son las mejor para el planeta. Algunos países están haciendo caso omiso a este hecho pero la verdad, es que los datos hablan por si solo. La temperatura del globo terráqueo sigue subiendo y si no se toman las medidas oportunas para 2035 la temperatura medía será dos grados mayor.
Para luchar contra el calentamiento global las energías renovables se prevé como el pilar fundamental a la hora de reducir la tasa de crecimiento de la temperatura global. Según publica S&P global, las energías limpias no solo son una tendencia emergente y lo que han aportado tanto a la economía mundial como al entorno ecológico es solo una pequeña parte de lo que aportarán en el futuro. La caída de los costos de producción, así como notable evolución de la tecnología de almacenamiento han convertido a las renovables en algo mucho mayor que una economía emergente.
Volviendo a las medidas necesarias para la reducción de la temperatura media del globo terráqueo, los analistas esperan una inversión de uno 10 billones de dólares hasta 2040 para así cumplir con los límites impuestos de que la temperatura media no suba en más de dos grados.
Según la agencia de calificación de riesgos americana, S&P global, en los últimos veinte años se ha conseguido con éxito eliminar el riesgo en los proyectos eólicos y solares y ahora, se espera que la tasa de crecimiento anual media hasta 2040 sea de un 7%.
La agencia de calificación de riesgos en su última evaluación apunto que ‘las inversiones mundiales en activos de infraestructura de energía renovable han sido astronómicas y en un buen momento, totalizando $ 2,6 billones de 2010 a 2019, según el informe Tendencias globales en inversión en energía renovable 2019 de BloombergNEF (BNEF) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente’.
‘Globalmente, las adiciones de capacidad renovable superan a los combustibles fósiles con la energía solar emergente como la tecnología dominante. Los impulsores clave de este crecimiento meteórico han sido las políticas gubernamentales y corporativas (como se expresan a través de FIT, incentivos fiscales y PPA) para cumplir con los objetivos de energía limpia, así como la disminución de los costos de instalación, con economías de escala que conducen a la paridad de la red’
Por lo tanto, el crecimiento de las energías renovables está directamente ligado con cumplir con el Acuerdo de París y el papel de las energías limpias se prevé decisivo para conseguir que la temperatura global no aumente, con las consecuencias que ello tendría.